¿No sabes moverte entre sábanas? ¿Tu pareja es más monótona que las películas de sobremesa de los domingos? ¿Tienes dificultades para disfrutar del único deporte que se puede hacer a oscuras? Nuestros consejos te guiarán por el
camino de la gloria sexual.


martes, 24 de marzo de 2009

Ahora hablan ellos


Ahora sí, son ellos los que hablan de lo que les gusta hacer con sus parejas. Huyendo de lo políticamente correcto, ellos nos cuentan con pelos y señales lo que quieren de ellas, sin censura. Desde el sexo oral a la postura del perrito, sin tapujos, ellos confiesan de una vez por todas sus gustos a Consexos Prácticos.

La postura del misionero aburre hasta al más clásico. La era en la que la mujer se tumba a recibir el sexo cual muñeca hinchable se ha acabado. Ellos piden iniciativa, que se dejen llevar también, pero que sean ellas las que tomen muchas de las decisiones que se presentan en el rin sexual. Es el momento del atrevimiento, de pedir qué queremos y cómo lo queremos. Se terminaron las indirectas, ellos quieren un sexo claro y para todos.

He aquí una lista de consejos que ellas pueden seguir en el camino de la iniciativa:

  • Lleva a tu chico a la cama, comienza con algún gesto sutil que le levante el ánimo y dirije el acto sexual. Nada de ponerse debajo y dejar que él maneje la situación.
  • Una buena señal de que ella es la que manda es que le coja de las manos y las guíe por su cuerpo, indicándole qué tocar, y enseñándole cómo hacerlo. Ellos lo agradecen, nuestro cuerpo es demasiado complicado.
  • La masturbación no es una competición a ver quien mueve la mano más rápido. Ellas deben hacerlo también con suavidad, el pene es un órgano sensible y a veces se puede hacer daño.
  • Sus posturas favoritas son la del perrito, y aquélla en la que la amante está encima; así ella marca el ritmo y los movimientos.

Sí, ellos prefieren el sexo oral. Es su práctica favorita, tanto que merece una lista de consejos aparte:

  • Se trata de sexo oral, no de masturbación con la boca y las manos. Es mejor olvidarse de ellas y utilizar sólo la lengua y los labios.
  • También se pueden utilizar los dientes. No se trata sólo de chupar, también se pueden utilizar mordiscos - siempre suaves, sin pasarse- y besos.
  • Por supuesto, la mayoría prefieren eyacular en la boca de su compañera, pero muchas no lo toleran. No pasa nada, no es ni mucho menos una obligación. Lo que sí deben hacer ellas es, cuando él avisa, no apartarse corriendo como si fuera a estallar una bomba y dejar solo en el orgasmo a su pareja. Retirarse con calma y hacer aparecer, entonces sí, las manos, para que él no llegue a la cumbre más solo que la una, es la mejor de las recomendaciones.

Y lo mejor para terminar, es preguntarle a su pareja: ¿Cuándo repetimos?